Artículos de Arte

Faber est suae quisque fortunae

La introducción del arte islámico en India

Ya vimos en el artículo anterior cómo hasta el siglo XIII, el territorio indio se dividió en diferente reinos tanto de signo hindú como islámico. Así, con la entrada de pueblos islámicos provenientes tanto de Afganistán como de Persia o Asia Central, el arte sufre una revolución drástica en India, convirtiéndose la arquitectura en el principal arte con las diferentes tipologías que traen estos pueblos musulmanes:

  • La mezquita (masjid)
  • El mausoleo (muqhara)
  • La escuela islámica (madrasa)
  • El lugar para reposo de los peregrinos (caravanserai)
  • Los grandes palacios fortificados para la corte (qila)

De todas las tradiciones arquitectónicas musulmanas, la del mundo indio es la que despliega una mayor diversidad e independencia. En estos edificios se usan elementos nunca antes utilizados en India como la cúpula y las cubiertas de medio cañón, que contrastan con las estructuras siempre adinteladas o de superposición de hiladas horizontales de la tradición hindú, que prohíbe a los arquitectos someter a las piedras a excesivas tensiones "no naturales".

La mezquita, arquitectónicamente tan diferente al templo hindú, va a utilizar con profusión la cúpula y las cubiertas de medio cañón, así como un gran patio cuadrado (sahn) porticado (riwaq) donde uno de los muros (el orientado a La Meca) coincide con el muro de qibla de la mezquita. El alminar (torre para llamar a la oración) pierde protagonismo e importancia a partir de la construcción del monumental Qutub Minar de Delhi.

El mausoleo, construido principalmente para albergar el cuerpo de los reyes se convirtió en India en un emblema de la autoridad real y en el elemento arquitectónico más novedoso del arte en India. Este elemento arquitectónico suele estar siempre en medio de un jardín atravesado por cuatro cauces de agua que evocan los cuatro ríos del Paraíso, son lugares geométricos del tipo charbag (un cuadrado dividido en cuatro por dos canales que se cruzan) con gran variedad de plantas y animales.

En cuanto a las madrasas y los caravanserais, decir que en India hay muy pocos ejemplos a pesar de la importancia de estas construcciones en el mundo islámico.

Los elementos arquitectónicos más importantes y de mayor repercusión en India, fueron los palacios y los fuertes. Los llamados qila (fuertes), son grandes recintos amurallados y fortificados que albergan tanto el palacio del soberano como las dependencias de la corte y de la administración del gobierno, además de servir de emblema y símbolo del poder imperial. Se puede decir que cada soberano mandaba construir su propio palacio, a veces dentro del propio recinto amurallado y en otras ocasiones hacían el suyo propio.

Izq.: Mezquita Quwwat-ul-Islam, construida con restos de 27 templos hindúes y jainistas, principios del siglo XIII, Delhi.

Drcha.: Qutub Minar, 1199 (levantado por Qutbuddin Aibak, reparado en 1503 por la dinastía Lodi), junto a la Mezquita Quwwat-ul-Islam, Delhi

A partir del 711, comenzaron las distintas incursiones de pueblos islámicos en India. Las primeras oleadas fueron de árabes que llegaron de forma pacífica y se asentaron como comerciantes en el Sind, tras una oleada violenta de los gaznevíes, de origen turco, que destruyeron muchos templos hidúes. En el 1160 se produjo una invasión de afganos, los ghoríes, que protagonizaron un verdadero dominio musulmán en India, proclamando el primer sultanato independiente de Delhi en el año 1193. A ellos se debe una de las más antiguas mezquitas, la de Quwwat-ul-Islam, en Delhi, aprovechando los restos de 27 templos hindúes que habían sido destruidos, así como el gran Qutub Minar que es una de las obras arquitectónicas más representativas de este primer arte islámico en India. Tiene 72,5 m. de altura y cuenta con cuatro pisos separados por cuatro balcones bellamente labrados sobre mocárabes, la planta es polilobulada, en una estrella de 24 puntas (12 en triángulo y 12 redondas) y casi 15 m. de diámetro.

Izq.: Alai Darwaza, 1311, (Alauddin Muhammad, Dinastía Khaljis), Delhi.

Drcha.: Mausoleo de Muhammad bin Tughaq, siglo XIV, Delhi.

Entre el 1290 y el 1320, una nueva invasión a cargo de los khalijs, de procedencia turco-afgana se hicieron con el control del norte de India. Ala Al-Din fue su más famoso gobernante, despótico y cruel, pero fue un gran patrón de la artes, a él se debe la construcción del Alai Darwaza, la entrada por el sur a la mezquita Quwwat-ul-Islam, en Delhi: un edificio cúbico sobre un plinto y cubierto por una cúpula baja, con muros de arisca roja y motivos decorativos en mármol blanco (se dice que es la primera construcción en India que aúna la arquitectura y la decoración islámica en un solo edificio).

En Delhi, el sultán Muhammad bin Tughaq, de origen mameluco, en el segundo cuarto del siglo XIV, se construyó un mausoleo, inspirado en los turco-iranios, que fue una fuente de inspiración para los mausoleos de muchos monarcas indios posteriores. Levantado en arisca roja y con una cúpula de mármol blanco, tiene el aspecto de una pequeña fortificación con robustos muros en talud y una planta pentagonal.

Varios mausoleos de dinastías posteriores, la Sayyid (siglo XV) y la Lodi (siglos XV-XVI), se pueden ver hoy día en Delhi, tanto de planta cuadrangular como octogonal (de esta última forma es la de Sikandar Lodi).

Bibliografía

Fernández del Campo, Eva, El arte de India, Ed. Akal, Madrid, 2013.

Artículo publicado en Diciembre de 2016 en la Revista Digital "Qué Aprendemos Hoy".

© Ramón Muñoz López